Alimentarse

Tenemos la suerte de dedicarnos a la actividad más esencial, la que nos convirtió en humanos. Transmutar de nutrirnos a alimentarnos, pensar en el ejercicio diario que tantas veces ocurrió.
Comprendemos la alimentación como un ritual rutinario, como un gesto acogedor, como recibiros en casa.

Por eso ella es la protagonista, la casa que nos vio nacer, el territorio al que pertenecemos, las sombras de sus árboles y calles al resguardo del sol que madura nuestras entrañas.
Pensamos mucho en cómo abrazar la gastronomía en la que creemos, la que nos emociona, la que llevamos dentro. Finalmente decidimos plasmarla en un único menú vivo como el entorno que encera, que fructifica en cambio constante.

No hablaremos de platos, pases o tiempos que la naturaleza no contempla. Lo haremos de equilibrio, de reflejar historias, de narrar lo que a diario observamos las decenas de personas que hacemos Barro. Desde lxs viticultorxs hasta ganaderxs y el equipo de cocina. La oferta entendida como un conjunto vivo.